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5 acciones a evitar para preservar sus posibilidades de recuperación de datos

5 acciones a evitar para preservar sus posibilidades de recuperación de datos

Un disco duro dañado o inaccesible es una señal de advertencia para el usuario: ¡los archivos que contiene están en peligro! Pero dado que el infierno está pavimentado de buenas intenciones, querer hacer demasiado para intentar recuperarlos puede provocar el efecto contrario: la pérdida permanente de datos. Enumeramos 5 acciones que definitivamente pueden conducir a este fin…

Recordatorio: un error, múltiples causas posibles

Un disco duro está diseñado para soportar golpes y fluctuaciones de temperatura habituales, pero tiene sus límites. Caída violenta, exposición prolongada a altas temperaturas, efecto de condensación: varios factores pueden provocar un fallo mecánico del disco duro y provocar daños en los cabezales de lectura, discos rayados o un motor parado.

El disco duro también es susceptible a daños eléctricos (sobretensión, cortocircuito, etc.), que pueden quemar la PCB con mayor frecuencia.

Un soporte de almacenamiento también puede volverse inutilizable sin dañarse físicamente. A continuación, hablaremos de un fallo lógico (formato, corrupción del sistema de archivos, mala gestión, etc.).

En la mayoría de los casos, todavía es posible recuperar datos de un disco duro fallido. Siempre que no amplifiques el problema adoptando malos reflejos.

1. Continúe utilizando un disco duro dañado

Ruido sospechoso, rendimiento lento, sectores defectuosos, datos inaccesibles: el disco duro puede seguir funcionando mientras muestra claramente signos de fatiga.

Mantener un avestruz y seguir utilizándolo a cualquier precio corre el riesgo de acelerar su fin de vida… y reducir las posibilidades de recuperar datos, a causa de una bandeja muy dañada o de nuevas escrituras que llegan para borrar archivos perdidos. Más información stop-computer

Al más mínimo signo de cansancio del disco duro o fallo repentino, apagar el ordenador es la mejor solución.

2. Deje el dispositivo encendido

Dado que la electricidad estática es el enemigo del disco duro, y de la mayoría de los componentes del ordenador, es recomendable no dejar un dispositivo encendido para descargarlo.

Hay un principio sencillo: ¡un disco duro que no está conectado no puede sufrir pérdida de datos! Con la excepción de los discos duros SSD, cuando se exponen en el calor.

3. Disco duro de apertura automática para el diagnóstico o reparación

Hazlo tú mismo rara vez es una buena filosofía cuando se trata de preservar los datos del disco duro. Abrirlo tú mismo comporta un gran riesgo: su exposición al aire ambiente, que invariablemente provocará que se deposite polvo en las bandejas o incluso huellas dactilares al manipular el soporte de almacenamiento.

Suficiente para provocar una reacción en cadena en la corrupción de datos. Los profesionales de la recuperación de datos realizan esta operación en una sala limpia para garantizar un entorno saludable, equipado con el equipo adecuado para preservar el hardware y sus componentes.

4. Baje el software de recuperación de datos

El primer instinto cuando los datos del disco duro son inaccesibles es introducir la consulta «recuperación de datos del disco duro» en un motor de búsqueda. Y luego viene una letanía de software de recuperación de datos que promete recuperar el acceso a los archivos perdidos.

Pero esto rompe dos reglas doradas anteriormente establecidas: encender el disco duro y utilizarlo, lo que aumenta el riesgo de pérdida permanente de datos.

Prueba de software de recuperación de datos la buena idea «falsa» del software de recuperación de datos: un uso reservado en gran parte a los expertos

5. Pon el disco duro en el congelador

En la sección «El remedio de la abuela», poner el disco duro en el congelador con la esperanza de conseguir datos inaccesibles no es una buena idea. Incluso colocado en un bolso impermeable, está expuesto a la humedad y la condensación, que nunca se mezclan bien con la electrónica.

Y si se utilizan demasiado rápidamente después de la congelación, los cabezales de lectura pueden tachar el disco duro y destruir permanentemente la información almacenada.

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